Los biotarros y biobotellas de CITRUSPACK, finalistas de los 2021 Sustainable Awards

El equipo del proyecto de LIFE CITRUSPACK ha resultado finalista de los prestigiosos premios 2021 Sustainable Awards. Los revolucionarios biotarros y biobotellas desarrollados a partir de pulpa y cáscara de cítrico en el marco del proyecto competirán por el título al producto packaging más innovador de este año a escala global, sometiéndose a la estricta valoración de un jurado compuesto por expertos mundiales, provenientes de toda la cadena de valor de este sector.

Los biotarros y biobotellas de CITRUSPACK, finalistas de los 2021 Sustainable Awards

Los ganadores se darán a conocer en la próxima Feria Europea de Envases, Tecnología y Procesos, cuya ceremonia final tendrá lugar el próximo 29 de septiembre en Nuremberg (Alemania). La edición de los Sustainable Awards de este año se consolida ya como una de las más competitivas de los últimos tiempos, con más de 300 propuestas de I+D que optaban a convertirse en candidatas al premio. Finalmente, solo cuatro de ellas han sido seleccionadas para optar a cada categoría.

Biobotellas y biotarros CITRUSPACK: hacia una economía circular

Los productos logrados en CITRUSPACK configuran por sí mismos el ciclo completo de la Economía Circular. Al mismo tiempo, mejoran las oportunidades de mercado para los agricultores y productores, gracias a la diversificación de residuos cítricos dentro de una nueva cadena de valor. En la actualidad, solo en España se generan miles de toneladas al año de residuos de frutas cítricas, que no dejan de contar con un altísimo potencial de aprovechamiento industrial.

Enmarcado en la Estrategia Europa 2020 de la Comisión Europea, el proyecto CITRUSPACK, tras años de ambiciosa investigación, logró desarrollar tres prototipos de bioproductos que revolucionarán la industria del embalaje y la cosmética: una botella de zumo (biobotella), un tarro cosmético (biotarro) y una crema facial hidratante. Todo ello, a partir de esos residuos cítricos. En el proyecto se han involucrado varios centros tecnológicos, laboratorios y empresas de hasta cinco países distintos (España, Grecia, Eslovenia, Francia, Bélgica): AITIIP, coordinador del proyecto, el grupo murciano AMC, Eroski, y los socios internacionales TECOS, OWS, PLASTIPOLIS Y OLVETIA.

Gracias al trabajo de los socios, se creó un material bioplástico (sin base de petróleo), que fue aditivado (mezclado) con fibra natural procedente de la cáscara y la pulpa de frutas cítricas. Con ese material, después, se elaboró la estructura de la botella y el tarro, obteniendo, además, el “check” de validación de compostabilidad industrial que marcan los parámetros europeos. Dos alternativas sostenibles que ahora lucharán por alzarse como los productos más sostenibles e innovadores del mundo.